Miriam Echaide Górriz, bioquímica de la Universidad Pública de Navarra (UPNA), ha desarrollado una innovadora proteína para mejorar la eficacia de las vacunas contra la COVID-19. Su tesis doctoral combina fragmentos del virus SARS-CoV-2, incluyendo las proteínas S, M y N, lo que podría generar una respuesta inmune más robusta, especialmente en poblaciones vulnerables como personas mayores y pacientes oncológicos. Además, ha investigado el uso de oleuropeína, un compuesto del olivo, como posible adyuvante para potenciar la respuesta inmune. Este avance representa un paso significativo en la lucha contra nuevas variantes del virus.
La bioquímica Miriam Echaide Górriz, originaria de Pamplona y nacida en 1997, ha logrado un avance significativo en la lucha contra la COVID-19. En su tesis doctoral defendida en la Universidad Pública de Navarra (UPNA), ha desarrollado una nueva proteína que integra tres fragmentos esenciales del SARS-CoV-2, el virus responsable de la pandemia. Este innovador enfoque busca enseñar al sistema inmunitario a ofrecer una defensa más robusta y efectiva, lo que podría resultar especialmente beneficioso para personas mayores de 80 años y otros grupos vulnerables, como los pacientes oncológicos.
Desde la aparición del SARS-CoV-2 en 2019, las vacunas han jugado un papel crucial en el control de la pandemia. Echaide señala que “pronto se introdujeron vacunas basadas en adenovirus y ARN mensajero, como las de Pfizer/BioNTech y Moderna, cuyo componente principal es la proteína S del virus”. Estas vacunas lograron reducir significativamente tanto la transmisión como la virulencia del virus. Sin embargo, el surgimiento de variantes resistentes ha planteado nuevos desafíos.
La investigadora destaca que “se ha observado que la inmunidad adquirida por poblaciones vulnerables, como los pacientes oncológicos y las personas mayores, tiende a ser efímera y su eficacia disminuye con las nuevas variantes del virus”. Su investigación ha permitido identificar otras dos proteínas virales, denominadas M y N, que también son reconocidas por el sistema inmunitario. Al combinar fragmentos de estas tres proteínas (S, M y N), Echaide creó una proteína recombinante que ha demostrado generar una respuesta inmune más completa en modelos animales.
Además, Echaide ha explorado el potencial de otras moléculas para mejorar la respuesta inmune generada por las vacunas en personas mayores. En particular, ha estudiado el efecto de la oleuropeína, un compuesto natural extraído del olivo. Los resultados obtenidos indican que esta molécula podría actuar como un adyuvante para fortalecer la protección proporcionada por futuras vacunas.
Miriam Echaide se graduó en Bioquímica por la Universidad de Navarra antes de cursar un máster en Biomoléculas y Dinámica Celular en la Universidad Autónoma de Madrid. Su interés por la investigación le llevó a realizar trabajos fin de estudios en centros prestigiosos como CIMA y el Centro Nacional de Biotecnología.
Durante su doctorado en Navarrabiomed, su trabajo culminó en dos artículos científicos publicados y presentaciones en cinco congresos. Además, realizó una estancia de seis meses en el Instituto Bernhard Nocht de Hamburgo (Alemania), donde participó en el proyecto europeo ISOLDA, enfocado en desarrollar nuevas vacunas contra enfermedades virales para personas mayores. Esta experiencia le permitió adquirir habilidades valiosas trabajando en un laboratorio especializado con bioseguridad nivel 3.
Miriam Echaide Górriz es una bioquímica nacida en Pamplona en 1997, que ha desarrollado una nueva proteína para reforzar las vacunas contra la COVID-19 como parte de su tesis doctoral defendida en la Universidad Pública de Navarra (UPNA).
En su tesis, Miriam Echaide ha desarrollado una nueva proteína que combina tres fragmentos clave del SARS-CoV-2 para mejorar la respuesta del sistema inmunitario y aumentar la eficacia de las vacunas, especialmente en grupos vulnerables.
La nueva proteína combina fragmentos de las proteínas S, M y N del virus SARS-CoV-2, lo que ha demostrado generar una respuesta inmune más completa en modelos animales comparado con las vacunas actuales.
La oleuropeína, un compuesto natural extraído del olivo, ha sido investigada por Miriam Echaide y se ha demostrado que potencia la actividad de los linfocitos T, lo que podría fortalecer la protección generada por futuras vacunas en personas mayores de 80 años.
Su investigación se desarrolla en Navarrabiomed, un centro de investigación biomédica vinculado al Gobierno Foral y a la UPNA. La autora ha trabajado durante su doctorado en proyectos relacionados con nuevas vacunas contra enfermedades virales.