La contaminación de las aguas costeras por elementos potencialmente tóxicos se ha convertido en un problema grave que demanda un control riguroso para prevenir daños a los ecosistemas marinos y a la salud de la población. Sin embargo, la baja concentración de contaminantes y la alta variabilidad en estos cuerpos de agua complican el análisis necesario para evaluar su estado. Durante los últimos ochenta años, se han realizado numerosos estudios que utilizan las concentraciones de algas como una forma de obtener una visión integrada de la contaminación en su entorno, mediante una técnica conocida como biomonitorización, respaldada por la Unión Europea en su Directiva Marco del Agua.
A pesar de los recientes avances que sugieren el uso del alga Fucus vesiculosus para este propósito, la aplicación de la biomonitorización enfrenta limitaciones significativas. Entre estas se encuentran la falta de estandarización en los protocolos, lo que dificulta la comparabilidad entre diferentes estudios; la escasez de investigaciones sobre la relación entre las concentraciones en las algas y en el medio acuático; y el desconocimiento sobre los mecanismos de carga, lo cual complica la interpretación de los resultados.
Investigación sobre las limitaciones del uso de algas pardas
Con el objetivo de abordar estas lagunas de conocimiento, el biólogo Antón Vázquez Arias ha desarrollado su tesis doctoral, donde pone en evidencia las limitaciones del uso de algas pardas para medir la contaminación ambiental en aguas costeras. Su investigación destaca el complejo proceso mediante el cual estos organismos absorben metales pesados, revelando así las dificultades para utilizarlos como biomonitores. Esta tesis es parte de la línea de investigación sobre biomonitorización del centro singular CRETUS, bajo la dirección del profesor Jesús Aboal, del Departamento de Biología Funcional de la Universidad de Santiago de Compostela (USC).
Para llevar a cabo su estudio, Vázquez Arias realizó cinco experimentos. Los dos primeros se centraron en probar trasplantes tratados de diversas maneras y analizar cómo sus concentraciones de elementos contaminantes se relacionaban con las del medio ambiente. Esto implicó exponer algas no contaminadas en diferentes puntos de la costa gallega para estudiar su capacidad de captación y compararla con las concentraciones presentes en el agua. Los tres experimentos restantes buscaron esclarecer los mecanismos detrás de esta captación, analizando algas recolectadas en sitios con distintos niveles de contaminación mediante técnicas avanzadas para mapear la distribución elemental a escala nanométrica.
Métodos más efectivos para evaluar la contaminación
Los resultados obtenidos indicaron que las concentraciones de contaminantes en las algas no reflejan necesariamente las concentraciones presentes en el agua circundante. Este fenómeno se debe a mecanismos complejos involucrados en su captación, donde intervienen múltiples factores fisiológicos y ambientales. El estudio también reveló que diferentes elementos tienen localizaciones y procesos específicos dentro de las células algales. Además, se observó que estas algas regulan cuidadosamente su absorción, evitando captar aquellos contaminantes sin funciones metabólicas y secuestrando solo aquellos necesarios en orgánulos especializados.
Estos hallazgos cuestionan investigaciones previas sobre biomonitorización utilizando algas y subrayan la necesidad urgente de investigar más a fondo la relación entre los contaminantes ambientales y aquellos presentes en las algas para emplear técnicas como esta con mayor eficacia.
El trabajo presentado por Vázquez Arias fue realizado dentro del marco del proyecto generado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Además, contó con apoyo institucional a través del programa Formación del Profesorado Universitario (FPU). Como parte del desarrollo de su tesis, el doctorando llevó a cabo dos estancias internacionales: una en el Plymouth Marine Laboratory, Inglaterra, financiada por el programa CRETUS; y otra en el Kochi Institute for Core Sample Research, Japón, apoyada también por FPU.
Apreciación académica y publicaciones destacadas
La tesis fue calificada con un sobresaliente cum laude por un tribunal compuesto por Marina Aboal Sanjurjo, Pilar Díaz Tapia y Rita García Seoane. De los cinco trabajos incluidos en ella, tres ya han sido publicados en revistas reconocidas como Journal of Hazardous Materials y Science of the Total Environment.
Preguntas sobre la noticia
¿Cuál es el problema principal relacionado con la contaminación de las aguas costeras?
La contaminación por elementos potencialmente tóxicos en aguas costeras es un grave problema que requiere un control estricto para evitar daños sobre los ecosistemas marinos y sobre la población.
¿Qué técnica se ha utilizado durante los últimos 80 años para evaluar la contaminación en aguas costeras?
Se ha utilizado una técnica conocida como biomonitorización, que implica el uso de las concentraciones de contaminantes en algas para obtener una visión integrada del estado de contaminación en su medio.
¿Cuáles son las limitaciones encontradas al usar algas pardas para medir la contaminación ambiental?
Las limitaciones incluyen la falta de estandarización del protocolo, la ausencia de estudios sobre la relación entre las concentraciones en las algas y en el medio, y el desconocimiento de los mecanismos de carga que afectan a la interpretación de los resultados.
¿Qué hallazgos importantes se presentaron en la tesis de Antón Vázquez Arias?
Los hallazgos revelan que las concentraciones de elementos contaminantes en las algas no reflejan necesariamente las concentraciones en el agua circundante debido a complejos mecanismos fisiológicos y ambientales que influyen en la captación de contaminantes por parte de las algas.
¿Qué se recomienda hacer para mejorar la efectividad de la biomonitorización con algas?
Se urge a investigar más profundamente la relación entre los contaminantes ambientales y los presentes en las algas para poder emplear técnicas de biomonitorización de manera efectiva y eficaz.
¿Quién dirigió la tesis y qué apoyo recibió el investigador?
La tesis fue dirigida por el profesor Jesús Aboal, del Departamento de Biología Funcional de la USC, y Antón Vázquez recibió apoyo del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, así como financiamiento para estancias internacionales.