La mala fama de su anterior sistema operativo Windows Mobile y la poca oferta que existe en la actualidad de teléfonos con este sistema, han sido las posibles causantes del poco éxito que ha tenido la nueva versión de Microsoft.
Por otro lado, Microsoft sabe que en este mercado existen dos grandes competidores a los que no puede hacer sombra, iOS y Android, los sistemas operativos con mayor número de usuarios y una estabilidad inmejorable. iOS, gracias a sus dispositivos Apple, ha tenido una mayor aceptación desde el principio, mientras que Android ha tenido que ir ganándose la confianza de sus usuarios a través de actualizaciones y renovando sus servicios.
Aunque Microsoft no pierde la esperanza y confía en su nuevo diseño y en la reputación que se ha ganado durante todos estos años gracias a sus clientes y usuarios, para recuperarse de este bache. Según su consejero delegado, Steve Ballmer, siguen siendo optimistas y confían en los Samsung Focus S, los HTC Titan y los HTC Radar para dar el salto a la fama de este nuevo sistema operativo.